Déjame decirte que todo suena mejor si sale de tu boca.
Que el día no parece tan gris si eres tú el que lo provoca.
Que no soy de nadie
y sigues arañándome.
Que mi subconsciencia prefiere hablar
mientras mi consciencia suele callar.
Que no quiero hacerte daño
que eso significa que he vuelto a ser yo.
Que no hay más miedo que cerrar los ojos,
abrirlos,
y haberte perdido.
Que escribo porque no sé besarte.
Que no sé besarte y por eso escapo.
Que no escapo porque soy cobarde.
Y que los cobardes también merecemos amor.
Que esto puede que no tenga sentido,
pero es que todo dejó de tenerlo cuando empecé a sentir.
Que mezclo prosa y verso como mezclo alcohol y sentimientos.
Nunca acaban bien si se encuentran en la misma habitación.
Nunca acabamos sudando por una discusión.