Mostrando entradas con la etiqueta texto. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta texto. Mostrar todas las entradas

Mi libro favorito

De repente, te encuentro en unas escaleras por las que nadie pasa, leyendo absorta un libro de Cortázar.
Escondida, hipnotizada y entregada observo tu manera de leer; esa sonrisa que sostienes en tu tan bonito y delicado rostro, moviendo los ojos, de aquí para allá, analizando cada palabra que lees, dándole la importancia necesaria a cada frase, admirando a Cortázar como se merece... y en ese momento a mí me ocurre lo mismo.


Pero contigo.


Te observo con el mismo interés que lees ese libro y por cada nueva frase que leo, más sonrío porque más me gustas, mi libro favorito. 
Tengo subrayado en mi mente todas las formas en las que te tomas la vida; esa manía de tocarte el pelo como método de relajación, tu manera de mirar a las personas de las que desconfías, tu cabezonería e intransigencia que tanto me pone.

Te leería cada noche, te releería por el día y, aún así, mis ganas de ti no descenderían, eres como el "un capítulo más" de cualquier friki de libros. En general, eres mi libro favorito.


En ese momento de reflexión, te has dado cuenta de que me encontraba allí, espiándote. Me quedé paralizada, mirándote fijamente y esperando a que movieras ficha, pero sólo me sonreíste y yo te proclamé mi talismán favorito.
En mis manos me dejaste el libro que leías y te fuiste sin decir nada. Tampoco fue necesario.
En la primera página dejaste un post-it que ponía: "Me gusta este libro porque resume mis sentimientos hacia ti".
En ese momento supe que te conquistaría con palabras, no habladurías y que ese libro me ayudaría a poder tenerte físicamente.
En mi cuarto: donde no me gusta que me observen; en mis noches: donde he compartido demasiados momentos con la soledad, en mi mesa: donde pongo en papel todo lo que me inquieta; en mi cabeza: donde has decidido atarte y quedarte a vivir conmigo.







ENCUÉNTRAME EN: 

”Twitter””Facebook””Tumblr””Email””Flickr”
Share:

Valiente

Valiente es aquel que ha amado una vez y vuelve hacerlo cada vez que se encuentra con unos nuevos ojos.
Valiente es aquel que se tira desde el cielo sin paracaídas. El que decide saltar al gran abismo y construir palabras de sus pensamientos.
Valiente el primero que ama y el que antes pierde.
El que escribe y se desnuda ante palabras que nunca se atrevió a escribir y de las que ahora no puede escapar. Valiente es el que grita al viento esperando respuesta y no concibe la idea de silencio.
Valiente el que llora, ríe y vive como el último día de su vida.




¿Puedes oírme? Soy yo, el miedo que recorre por tus venas. El que decide cuándo vas a dar un paso o retrocederás dos décadas. Soy el que ordena cuándo matarte con una palabra o hacerte ver que no vales nada.
Soy ese que se divierte de tus miedos y el que teme la valentía que, cuando quieres, demuestras.

No te diré cómo escapar de mí. Averígualo. Si antes no te he atrapado.

No puedes hacer oídos sordos a mis gritos, esos que te dicen que si no caes no puedes levantarte. Que si no has probado lo oscuro que puede ser tu vida, no sabrás la luz que puede haber en ella. Porque no me debes temer, me debes alcanzar y destruir; luchar por ti y eliminar esas barreras que sola te has puesto.
No tienes miedo al miedo. Temes a no conseguir tus sueños. Y yo, querida, yo no me hago cargo de tus actos.
La vida es un cuadro en blanco y tú eres el pintor. No dejes que nadie te diga cómo pintarlo.


Así que sé valiente, olvídate de mí y empieza a pintar con los ojos cerrados. No digas lo valiente que eres. Demuéstratelo. Demuéstrate a ti misma que puedes conseguir todo lo que quieras y que no debes dejar que ni yo, el miedo, destruya tus sueños.






Share: